Si su respiración de rescate inicial no hace que el pecho se eleve como una respiración normal, antes del próximo intento:
- Examine la boca de la víctima y extraiga cualquier obstrucción visible.
- Compruebe que la maniobra frente-mentón está realizada correctamente.
Continúe combinando 30 compresiones torácicas con 2 respiraciones de rescate. Deténgase solamente cuando:
- Algún profesional se hace cargo.
- Usted está físicamente agotado.
- La víctima empieza a respirar con tranquilidad.
No interrumpa las compresiones torácicas por otras razones.
Si no puede o no quiere hacer las respiraciones de rescate, haga sólo compresiones torácicas. Si se realizan sólo compresiones torácicas, deberían ser continuas, a una frecuencia de al menos 100 por minuto pero no más de 120 por minuto, con una profundidad de al menos 5 cm pero no mayor de 6 cm.